El entorno de la casa es impresionante, la atención del personal ha sido muy buena, especialmente la chica morena que atiende el desayuno y el bar. No obstante la habitación era demasiado pequeña, aún estando solo, en el baño no se cabía ni de lado. Adicionalmente el aislamiento de las habitaciones es insuficiente, se oye todo de las habitaciones contiguas, lo cual es un problema si quieres dormir o deseas un poco de intimidad.