Viajamos a Madrid en promedio una vez al año, en esta ocasión porque llevábamos a un adolescente fan del soccer decidimos quedarnos en esta propiedad.
Comenzando con lo positivo :
- su personal salva la situación , todos son muy atentos y amables.
- muy buena ubicación , aunque cabe recalcar que no es único hotel en la zona , hay muchos de donde elegir.
- agradable terraza bar y restaurante.
Contras:
- las habitaciones son ridículamente pequeñas, no puedes ni mantener una maleta abierta dentro de la misma. Considerando el costo por noche , hay muchísimas más opciones mucho más confortables que ese mismo presupuesto te puede permitir.
- baño y regadera incómodos y sin nada de privacidad , no hay forma de vestirte o desvestirte sin invadir la privacidad del acompañante.
- Cuarto ruidoso. Sabemos que nos quedamos en Gran Vía , una zona de mucho movimiento , pero aún así las habitaciones carecen de aislamiento. Cada que en el cuarto vecino se abría la puerta sentías que era TU puerta la que se abría , lo
Mismo con sonidos de regadera, pláticas. Definitivamente no es un lugar que permita descansar plácidamente.
- Climatización insuficiente: se sabe que Madrid lidia con Veranos de 35-40 grados , así que deberían de inventir en otro tipo de tecnología , la habitación apenas alcanzaba a “refrescarse”, fue incómodo pasar la noche con calor.
El hotel es “lindo” a secas , en resúmen Madrid ofrece muchas más opciones de hospedaje por el mismo presupuesto.