El personal se portó muy amable y a unos cuantos pasos está el metro; además, a unos 15 minutos a pie puedes acceder a la playa :) el único detalle a mi parecer es que al ser solo un piso se escucha demasiado ruido a las habitaciones :c, aunque fueron momentos, no toda la estancia. Así como el tener que timbrar para que te abrieran la puerta y poder entrar. Fuera de eso, me hicieron la limpieza diario y todo muy bien, mi habitación la considero amplia.