Es probablemente el peor hotel en el que me he quedado y llevo varios años viajando, tanto de negocios como de placer. Mi esposa y yo nos quedamos una noche en este hotel y la verdad es que la experiencia fue muy mala. Para empezar, Hoteles.com lo tiene calificado con 9.2 y nosotros creemos que no llega ni a 6; Hoteles.com nos ofrecía WiFi en la reservación, pero el WiFi no llegaba a nuestro cuarto, solo está disponible en el área del lobby y al parecer unos cuartos cercanos a éste sí pueden pescar la señal. Todo es de muy mala calidad, desde el jabón, la regadera, las sábanas, las almohadas, etc. En la habitación se escucha absolutamente todo lo que pasa en los cuartos de a lado y en el pasillo, cero privacidad. Lo único que rescató un poco la estancia, fue el desayuno y la atención de algunos empleados (no todos); el desayuno estuvo rico, aunque no es nada barato y no se puede dejar propina con tarjeta, lo que es bastante injusto para los empleados, ya que en nuestro caso, no traíamos efectivo y no pudimos dejarles nada de propina.