El hotel es muy agradable y su personal amable. Sin embargo: (i) al llegar fuimos rudamente recibidos por el conserje, quien se mostró reticente a que nos estacionáramos frente a la propiedad y nos dijo que ya no podíamos cenar, por la hora (21:30), lo que resultó falso; (ii) escurre agua por la fachada exterior de varias habitaciones, incluida la mía, por lo que el piso de entrada estaba mojado; me ofrecieron secarlo y no lo hicieron; (iii) el precio por mascota es muy alto, especialmente considerando que no te proporcionan nada para ella..